Las empresas de tecnología son las que ganan más puestos en la clasificación por valor en Bolsa - Firmas de EE UU y China acaparan 29 de las 50 primeras plazasEl año de la Gran Recesión ha sido enormemente rentable en las Bolsas de todo el mundo. El veredicto del mercado, sin embargo, ha sido desigual. Petroleras y grandes bancos siguen siendo las firmas dominantes en la clasificación de los gigantes empresariales por valor en Bolsa. Entre ellas, no obstante, en 2009 han vuelto a brillar con luz propia las empresas de tecnología e informática, como atestigua la subida del 44% en el Nasdaq, el mercado tecnológico de Estados Unidos, y el hecho de que cinco de los 10 mejores valores del índice Dow Jones hayan sido de ese sector.
Los dos grandes protagonistas han sido Google, que fortalece su posición dominante en Internet, y Apple, capaz de reinventarse a sí misma por enésima vez, esta vez con el iPhone como bandera.
Apple ni siquiera aparecía a finales de 2008 en la lista de las 50 empresas del mundo con mayor valor en Bolsa y este año ha logrado escalar hasta la undécima posición, con una capitalización de 132.000 millones de euros, más del cuádruple que Nokia. La finlandesa era hasta hace pocos años todopoderosa en la telefonía celular y la primera empresa de la zona euro por valor en Bolsa. El arrollador éxito del iPhone, que ha revolucionado el mundo de las aplicaciones para móviles, ha permitido a la compañía revalorizarse un 147% en 2009. Es la cuarta vez en los últimos seis años que las acciones de la compañía que dirige Steve Jobs suben más del 100%. Desde comienzos de 2003, su precio se ha multiplicado por 30. Sus iPod, sus portátiles o sus grandes tiendas han impulsado las ventas de la compañía.
Google, por su parte, ha pasado en un año del puesto 35º al 10º. Su historia bursátil es más corta que la de Apple, pero casi igual de exitosa. Tras asentar la hegemonía de su buscador, se ha lanzado a la conquista de nuevos mercados, desde los vídeos de You Tube a los sistemas operativos para móviles, pasando por la geolocalización o el software para ordenadores. Su próximo gran estreno será el Nexus One, su réplica del iPhone, que se vestirá de largo la semana entrante.
Ambas otean ya en el horizonte a Microsoft, pese a que ésta también escala posiciones y se sitúa en la tercera plaza de la clasificación. Desde la burbuja tecnológica de hace una década no se había visto un protagonismo similar entre las empresas del sector, que también cuenta con IBM, Cisco, Oracle, HP e Intel entre las 50 compañías del mundo con mayor valor en Bolsa. Ocho empresas de la nueva economía frente a una sola del automóvil, el sector industrial más poderoso, paradigma de la vieja economía.
La tecnología se erige como la gran alternativa de poder bursátil frente a las grandes empresas de energía y financieras, pero éstas siguen dominando el panorama. Suyas son las dos primeras plazas de la clasificación, con Petrochina y Exxon. La china recupera el primer puesto que conquistó por primera vez en 2007 y que perdió al año pasado a manos de la estadounidense. La tercera petrolera por valor en Bolsa al cierre de 2009 ha sido la brasileña Petrobras, beneficiada por los enormes descubrimientos de crudo de la cuenca de Santos y por la rendida entrega de los inversores al país carioca. Petrobras pasa del puesto 36º al 9º de la clasificación general y supera a los tradicionales gigantes europeos del sector, como Royal Dutch Shell, BP o Total.
Las empresas de energía aún tienen a 11 representantes entre las 50 del mundo que más valen en Bolsa. A ellas se suman otras tres compañías de materias primas, que también están entre las que más posiciones avanzan.
La banca, mientras, restaña las heridas de la crisis financiera. En 2006 era el sector dominante, con 14 de las 50 mayores empresas. En 2008 tocó suelo, con sólo seis, y ahora remonta el vuelo tras recibir, eso sí, enormes inyecciones de capital. De las nueve entidades que figuran entre las 50 primeras de la clasificación de cierre de 2009, cuatro son chinas (una liga aparte en este sector), cuatro estadounidenses y sólo una europea: el español Banco Santander, que escala 21 puestos en la clasificación general.
Con el Santander y Telefónica, que ha adelantado este año a Vodafone y ya es la tercera de su sector en el mundo, España cuenta con dos empresas entre las 50 del mundo que más valen en Bolsa, todo un logro si se tiene en cuenta que economías mucho mayores como Alemania no tienen ninguna y Japón o Italia, sólo una. Sí es cierto que tanto Alemania como Japón tienen decenas de empresas entre las 500 primeras, mientras que España sólo aporta media docena más. Los casos del Santander y Telefónica tienen mucho que ver, por otro lado, con la proyección internacional de ambas, especialmente en Latinoamérica.
Para las empresas de telecomunicaciones, 2009 no ha sido especialmente brillante. Soportaron mejor el desplome de las Bolsas de 2008, pero eso mismo ha frenado su rebote. Todas pierden posiciones y hay dos (Verizon y NTT Docomo) que abandonan la lista de las 50 primeras. La misma explicación hace que las farmacéuticas pierdan también puestos en una clasificación que baila cada día al son que tocan los inversores.
Apple ni siquiera aparecía a finales de 2008 en la lista de las 50 empresas del mundo con mayor valor en Bolsa y este año ha logrado escalar hasta la undécima posición, con una capitalización de 132.000 millones de euros, más del cuádruple que Nokia. La finlandesa era hasta hace pocos años todopoderosa en la telefonía celular y la primera empresa de la zona euro por valor en Bolsa. El arrollador éxito del iPhone, que ha revolucionado el mundo de las aplicaciones para móviles, ha permitido a la compañía revalorizarse un 147% en 2009. Es la cuarta vez en los últimos seis años que las acciones de la compañía que dirige Steve Jobs suben más del 100%. Desde comienzos de 2003, su precio se ha multiplicado por 30. Sus iPod, sus portátiles o sus grandes tiendas han impulsado las ventas de la compañía.
Google, por su parte, ha pasado en un año del puesto 35º al 10º. Su historia bursátil es más corta que la de Apple, pero casi igual de exitosa. Tras asentar la hegemonía de su buscador, se ha lanzado a la conquista de nuevos mercados, desde los vídeos de You Tube a los sistemas operativos para móviles, pasando por la geolocalización o el software para ordenadores. Su próximo gran estreno será el Nexus One, su réplica del iPhone, que se vestirá de largo la semana entrante.
Ambas otean ya en el horizonte a Microsoft, pese a que ésta también escala posiciones y se sitúa en la tercera plaza de la clasificación. Desde la burbuja tecnológica de hace una década no se había visto un protagonismo similar entre las empresas del sector, que también cuenta con IBM, Cisco, Oracle, HP e Intel entre las 50 compañías del mundo con mayor valor en Bolsa. Ocho empresas de la nueva economía frente a una sola del automóvil, el sector industrial más poderoso, paradigma de la vieja economía.
La tecnología se erige como la gran alternativa de poder bursátil frente a las grandes empresas de energía y financieras, pero éstas siguen dominando el panorama. Suyas son las dos primeras plazas de la clasificación, con Petrochina y Exxon. La china recupera el primer puesto que conquistó por primera vez en 2007 y que perdió al año pasado a manos de la estadounidense. La tercera petrolera por valor en Bolsa al cierre de 2009 ha sido la brasileña Petrobras, beneficiada por los enormes descubrimientos de crudo de la cuenca de Santos y por la rendida entrega de los inversores al país carioca. Petrobras pasa del puesto 36º al 9º de la clasificación general y supera a los tradicionales gigantes europeos del sector, como Royal Dutch Shell, BP o Total.
Las empresas de energía aún tienen a 11 representantes entre las 50 del mundo que más valen en Bolsa. A ellas se suman otras tres compañías de materias primas, que también están entre las que más posiciones avanzan.
La banca, mientras, restaña las heridas de la crisis financiera. En 2006 era el sector dominante, con 14 de las 50 mayores empresas. En 2008 tocó suelo, con sólo seis, y ahora remonta el vuelo tras recibir, eso sí, enormes inyecciones de capital. De las nueve entidades que figuran entre las 50 primeras de la clasificación de cierre de 2009, cuatro son chinas (una liga aparte en este sector), cuatro estadounidenses y sólo una europea: el español Banco Santander, que escala 21 puestos en la clasificación general.
Con el Santander y Telefónica, que ha adelantado este año a Vodafone y ya es la tercera de su sector en el mundo, España cuenta con dos empresas entre las 50 del mundo que más valen en Bolsa, todo un logro si se tiene en cuenta que economías mucho mayores como Alemania no tienen ninguna y Japón o Italia, sólo una. Sí es cierto que tanto Alemania como Japón tienen decenas de empresas entre las 500 primeras, mientras que España sólo aporta media docena más. Los casos del Santander y Telefónica tienen mucho que ver, por otro lado, con la proyección internacional de ambas, especialmente en Latinoamérica.
Para las empresas de telecomunicaciones, 2009 no ha sido especialmente brillante. Soportaron mejor el desplome de las Bolsas de 2008, pero eso mismo ha frenado su rebote. Todas pierden posiciones y hay dos (Verizon y NTT Docomo) que abandonan la lista de las 50 primeras. La misma explicación hace que las farmacéuticas pierdan también puestos en una clasificación que baila cada día al son que tocan los inversores.
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