La Bolsa de Valores de Nueva York cerró con pérdidas y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, bajó un 0,5% y encadenó su séptimo día consecutivo de números rojos por primera vez desde hace un año.
Según datos provisionales al cierre de las operaciones, ese índice bajó 90,74 puntos y terminó 18.313,77 unidades, el selectivo S&P 500 perdió un 0,64 %, mientras que el índice compuesto del mercado Nasdaq cayó un 0,9%.
Sucedió después de que un desalentador pronóstico de la farmacéutica Pfizer y débiles datos económicos en Estados Unidos decepcionaron a los inversores. En este sentido, el Dow Jones pierde un 0,6%, el selectivo S&P cae un 0,8% y el tecnológico Nasdaq retrocede un 1,1%.
Pfizer, un componente del promedio industrial Dow Jones, reportó ingresos y ganancias que superaron las estimaciones de analistas, pero mantuvo sus pronósticos previos para este año, lo que debilitó sus acciones en un 2%, a u$s 36,66.
El descenso en los papeles representó la mayor pérdida porcentual del Dow Jones y la mayor caída en el índice S&P 500.
Datos mostraron que el gasto del consumidor estadounidense aumentó más de lo esperado en junio debido a que las familias compraron variados bienes y servicios.
No obstante, los precios sobre gastos de consumo personal (PCE por sus siglas en inglés), la medida de inflación preferida por la Reserva Federal de Estados Unidos, aumentó un 1,6% en los doce meses a junio, con lo que cayó por debajo de la meta del banco central de 2%.
Por su parte, las acciones de las automotrices Ford y General Motors cayeron casi un 3% luego de reportar un descenso en las entregas de vehículos al mercado estadounidense en julio.
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